Saltar al contenido

Las 3 mejores dietas para principiantes de Yoga

Practicar yoga se ha convertido en una de las actividades más seguidas por miles de personas en el mundo. Esta disciplina milenaria ayuda a unificar el cuerpo y la mente a través de la respiración y haciendo uso de diferentes posturas físicas, ejercicios de respiración y técnicas de respiración para mejorar el estado general de la salud. Y es que en la actualidad, muchas personas en el mundo occidental practican yoga como una herramienta útil para controlar el estrés y para realizar ejercicios que proporcionan alivio a dolores crónicos o ayuda para mejorar los estados depresivos o la ansiedad. Pero la práctica del yoga va más allá de la práctica de los ejercicios de respiración, estiramientos y técnicas de meditación, puede llegar a ser un estilo de vida, y por ello, también puede verse reflejado a la hora de comer.

Una dieta yóguica o basada en los principios del yoga no pretende solo buscar una pérdida de peso, sino que comprende un cambio en el estilo de vida y en los principios en los cuales se basa la alimentación de una persona. Para llevar un estilo de vida en el que el yoga esté presente se ha de ser vegano, los alimentos tienen que estar libres de productos químicos, es decir, ser orgánicos, y en su mayoría tienen que ser frescos. En cuanto a la forma de tomarlos, debe ser a intervalos regulares. Además, el ayuno también forma parte de este estilo de vida, y se realiza durante al menos un día. Obviamente no todas las personas desean seguir esta dieta, y algunos deciden no ser vegano y comer sólo carne. Tienen sus razones y las exponen, pero, en cualquier caso, ser vegano va más allá de un tipo concreto de alimentación, conlleva un estado mental en el que la persona se funde con el medio y con el resto de seres vivos en busca de una armonía perfecta. 

En cualquier caso, es obvio que dependiendo de cada persona la dieta podrá ser más o menos estricta con la carne y destinada a cumplir determinados objetivos.

Dietas para principiantes de Yoga

Existen diferentes formas de entender la dieta yóguica. Por supuesto, si el objetivo primordial de realizarla es la pérdida de peso y mejorar el estado físico, entonces no es estrictamente necesario renunciar a la carne o a los productos procedentes de los animales, como pueden ser el huevo o la leche. Es importante, no obstante, tener presente que la ingesta de vegetales, frutas, verduras y hortalizas preferentemente frescos siempre será más interesante a la hora de reducir la ingesta de calorías.

Dieta vegetariana

Por el contrario, si la persona, aparte de una pérdida de peso, lo que realmente va buscando es basar sus actuaciones y pensamientos en los principios del Yoga, entonces sí que será necesario que se ponga estricta consigo misma y evite la carne. Básicamente, la mejor dieta para la práctica del yoga debe seguir el principio indio de la no violencia, que se aplica a cualquier ser vivo. Por tanto, la comida de un yogui debe tener el menor impacto posible en el medio ambiente. Esto quiere decir que para garantizar la no violencia hacia los animales el yogui ha de ser vegetariano (y más probablemente vegano). 

En cualquier caso, antes de comenzar a realizar cualquier tipo de dieta, del tipo que sea es importante informarse para estar saludable y sentirse bien. Puesto que, dependiendo de las características, necesidades y deseos de cada persona, una dieta u otra podrá ser la más conveniente. Al menos al principio. No hay que volverse vegetariano de la noche a la mañana, todo debe seguir un proceso evolutivo físico y mental, para abrazar ese nuevo estilo de vida de forma coherente y con convencimiento. 

Dieta Sattvica

Esta dieta incluye alimentos puros o naturales como es el caso de las frutas y verduras frescas, los frijoles y las lentejas, los granos integrales las semillas y las nueces, los azúcares sin refinar, como es el caso de la miel, las especias, así como lactes básicos como la leche, la mantequilla o el queso. La dieta Sáttvica tiene muy en cuenta las estaciones y los alimentos de temporada. De hecho, intentan evitar aquellos alimentos frescos que no son de temporada, puesto que entienden que no son naturales, ya que no siguen el ciclo lógico de las cosechas. 

En cuanto al consumo de lácteos, es importante recalcar que estos se pueden tomar en la dieta Sáttvica siempre y cuando el animal haya sido alimentado, cuidado y ordeñado en condiciones apropiadas, es decir, sin causarle daño alguno. Esta dificultad para especificar la definición “apropiada” ha hecho que muchos yoguis no consuman alimentos procedentes de la leche de vaca, ni la leche misma y hayan optado por alternativas como las bebidas vegetales (leche de almendras, de coco, etc.)

Dieta libre de químicos 

Existe una tercera manera de entender la dieta en las personas que se quieren acercar a los principios del yoga desde el punto de vista gastronómico. Se trata de la elección de alimentos que estén libres de químicos. Si se pretende un cambio de estilo de vida real y beneficioso es muy importante tener en cuenta este precepto: todo lo que se consuma debe estar libre de sustancias tóxicas y de químicos. Dicho de otra manera, todo lo que se coma debe ser de origen orgánico. 

En el caso de que se coma carne esta debe ser procedente de animales de pasto y no de granjas industriales, de los que están alimentados con hierba y grano y viven en armonía con la naturaleza y no estabulados.  

Hoy en día es complicado poder obtener alimentos 100% libres de pesticidas, que no hayan sido tratados con edulcorantes o químicos artificiales, etc., pero lo cierto es que cada vez se tiene más conciencia de que implementando pequeños cambios en la dieta diaria, como es la eliminación de hábitos tóxicos como el tabaco, el alcohol o la cafeína, se podrá poco a poco ir formulando un camino de vida cada vez más yogui y en comunión con la naturaleza.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *