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Kundalini Prenatal: La iniciación a la tranquilidad desde el vientre.

Toda nuestra vida desde el inicio tiene como objetivo el encuentro con la felicidad.

En nuestras diferentes etapas la podemos obtener de variadas formas: el juguete que deseábamos de niños, la compañía de nuestra familia, las amistades incondicionales de la juventud o la realización profesional en la vida adulta.

Muchos encuentran la felicidad al crear una familia con la pareja que quieren, la tranquilidad económica o los éxitos de sus hijos. La felicidad, es un bello estado que se logra cuando,  momentáneamente no hay tensión, y se ve inundado de paz y tranquilidad, se disfruta de la armonía y mejor aún, se comparte.

El kundalini yoga en si, nos ayuda a encontrar el estado de felicidad por medio del equilibrio integral.  Cuando se aplica en el embarazo, llena el ambiente de equilibrio, e inicia al bebé a interiorizar el estado de paz y armonía que necesita, haciendo de este para él, un estado normal y natural desde antes de nacer.

Compartiendo rutinas de ejercicio: desarrollar el bello vinculo madre- bebé.

También se debe de reconocer el importante e inquebrantable vínculo que se crea con la práctica del yoga. No es sólo el bebé que llevas dentro desarrollándose en ti, es un ser de luz, limpio y auténtico que escucha, siente y sobretodo percibe cada movimiento y reacción de la madre. Mediante ejercicios de yoga, la madre puede compartir diálogos con su bebé, explicándole cada movimiento y sensación. El bebé percibe todo y con la práctica relacionará cada postura con la sensación, además del nombre de la colocación y otras cosas y recomendaciones, como: «no te muevas, quédate quietecito y respira profundo…»

Su reloj interno memoriza horario y rutina.

Cuando asignas horas específicas todos los días, su reloj interno se activará puntualmente con el tiempo. Se puede percibir al nuevo practicante exigir su rutina diaria, lo cual ayuda a desarrollar una personalidad ordenada y organizada. Mantener un horario también es de ayuda para crear personas pacientes y puntuales en sus acciones, por ejemplo, sabrá que después de la clase podrá tomar un refrigerio, es momento de ir a casa o que verá a papá.

Estimula al artista que llevas dentro.

Los ejercicios de yoga despiertan los sentidos, y es mucho más estimulante si se acompañan las rutinas con música de piano, aves, violín u otros. El despertar y desarrollo de su audición se logra mucho mejor cuando tiene acceso a diferentes tipos de sonidos además de desarrollar el ritmo, por lo que no te sorprendas si con los años observas que tiene interés en los instrumentos musicales o la danza!

Y no solo el oído se desarrolla mucho mejor: hay una gran variedad de aromas en inciensos que puedes probar para estimular su sentido del olfato, pero debes tener cuidado de usarlo en espacios muy ventilados para evitar inhalaciones excesivas de humo. Si no cuentas con espacio suficientemente ventilado, puedes optar por difusores de aceites esenciales o encender una velita aromática que funcionan igualmente muy bien.

 

Meditación temprana: un momento para centrarse en el interior más que en el exterior.

Hay un momento de la sesión que se dedica a la meditación. Cuando estás embarazada, tu atención debe centrarse, además de la respiración profunda, a la conciencia de la columna y el cuerpo. Una de las tantas formas bellas de meditar en el embarazo, es la visualización: respirar profundamente y visualizar tu cuerpo, en la postura que esté, llena de luz, la columna vertebral radiante, el bebé como una hermosa y brillante fuente de luz y calor, la columna erguida y la respiración profunda.

Visualizar la columna larga y erguida, sin obstrucciones en la cual circula la energía interna de tu cuerpo fluidamente conectándose con la energía brillante y pura del bebé, respirando profundo, exhalando lento por nariz… Pon atención especial a cada movimiento y reacción del bebe, y atesoralos como una conversación privada en silencio entre ambos.

 

Relajación consciente: después de la actividad, viene la calma.

Al final de la rutina, destinar un momento para la relajación consciente es muy recomendable. Puede ser dirigida por otra persona, o ser un momento para el silencio personal. En la relajación consciente se enfoca la atención únicamente a la respiración, los músculos se desactivan totalmente y descansan, y el peso del cuerpo se libera a la tierra con cada exhalación; no hay resistencia, solo hay calma, tranquilidad y reposo, profundo y consciente. Este momento puede ser de tres a diez minutos como máximo.

Si practicaste yoga antes, sabrás algunos ejercicios y posturas que te servirán, pero lo mejor, ya seas principiante o avanzado, lo mejor es que siempre te guíes de un instructor especializado en yoga prenatal, que te ayude y corrija en cada colocación y ejercicio, además de indicar y guiar las relajaciones y meditaciones de la mejor manera. Hazle saber todas tus molestias, como lesiones en la rodilla o problemas para dormir, y sobre todo, consulta siempre con tu doctor su opinión sobre si puedes practicar yoga y con que frecuencia.

No hay nada mejor cuando se es madre que compartir momentos únicos con sus hijos, incluso si es antes de nacer! Hasta nuestra siguiente entrega y que tengan un luminoso día.

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